domingo, 21 de junio de 2009

Apresurando las aguas



Justo cuando los aspirantes a universitarios más nerviosos estaban, el resultado de sus maratonianos exámenes estaban a punto de ser publicados por Internet, la naturaleza se enfureció, se abrieron los cielos transformando las nubes en cataratas de líquido, apresurando las aguas, formando ríos improvisados en el suelo que pisan los vivos, ríos que luego se remansan, cubriendo todo de lodo, respuesta del planeta al maltrato recibido del ser humano en los últimos cincuenta años.





Como consecuencia del cambio climático, que no hemos querido, ni siquiera intentado detener, muchos esfuerzos y recursos tendrán que invertir estos jóvenes que ahora comienzan una nueva fase en su formación, para al menos intentar que la vida en el planeta no se deteriore hasta el punto de hacerla imposible.

5 comentarios:

Merche Pallarés dijo...

Es alucinante como hoy en dia en cuanto caen cuatro gotas, ¡todo se inunda! Ay..., tanta construcción en salidas (torrentes) naturales que han sido taponados... Un desastre. Besotes, M.

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

es que como dice merche...¡como ya no llueve!...se construye en cualquier sitio...un abrazo

De donde son las imágenes???

Antonio Aguilera dijo...

Con la lluvia: o Juan o Juanillo.
O no llueve y estamos con la lengua fuera, o nos tenemnos que calzar los zancos para no ahogarnos en las lagunas que se forman.
No podemos usurparle el terreno a la Naturaleza: al rìo lo que es del rìo; sus cauces naturales desde allende los tiempos remotos.

Me paso pabajo pa ver tu Quijote......

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Al clima lo hemos vuelto locos... Vi las imágenes por televisión. Ahora llueve por aquí como nunca lo hizo.

pancho dijo...

A modo de respuesta colectiva a vuestros comentarios os diré que en el caso de la foto tenéis razón. Por este lugar iba un antiguo regato que canalizaron para hacer una calle en su superficie.
La foto es de Salamanca. en el cruce de la av/ Portugal con la plaza del Barrio Vidal. había ido a hacer un "mandao" y me pilló la tormenta: casi una hora metido en un portal esperando a que escampara. Qué pena que no tuviera la cámara a mano. La foto está hecha una hora después de la tormenta, cuando llegué a casa y volví a tomarla. La primera vez había casi un metro de agua, se puede ver la altura que alcanzó el agua en las marcas de la pared.
Un abrazo a todos y gracias por vuestros comentarios y visita.