viernes, 15 de mayo de 2009

Hundido el mentón

Plaza de toros del Castañar de Béjar

Busto de D Miguel en el zaguán del Ayuntamiento de Béjar

Capítulo LII (2)

A alguno de los chavales de la Escuela Taller “Alaíz 3” aún les dura la cara de sorpresa que pusieron cuando al desescombrar las talanqueras de piedra de “La ancianita”, (así llamada por ser la plaza de toros más antigua de España), descubrieron una caja de plomo con unos pergaminos dentro, bastante bien conservados, a pesar de los 400 años pasados desde su enterramiento. Faena que realizaban a mano y con cuidado, pues debían volver a utilizar las mismas lanchas de piedra en la restauración. Ni que decir tiene que a su sorpresa se unió un cierto rictus de decepción cuando, vencidos por la curiosidad, al abrir la caja, no sin cierta dificultad; las bisagras estaban oxidadas y corrían mal, no encontraron lo que esperaban. Soñaban con encontrar algún tesoro u objeto de valor en algo guardado con tanto esmero.

Inmediatamente el encargado de la restauración se puso en contacto con la Concejala de Cultura a la que puso en conocimiento del hallazgo. Ella ordenó que dejaran la caja en su sitio hasta que la viera el especialista en arte de la Junta de Castilla y León. Quiso la fortuna que fuera Artemio Segura, gran lector de autores del Barroco español. Nada más echar una ojeada a los pergaminos se dio cuenta de qué se trataba.

Se trataba de una crónica de la primera corrida de toros que se había celebrado en la plaza de toros del Castañar. El Duque de Béjar, Marqués de Gibraleón, Conde de Benalcázar y Bañares… que era quien de su puño y letra ponía la firma, junto a la del Manco de Lepanto, en el último folio del pergamino, había decidido dar por terminada la construcción del coso taurino dando una corrida de toros a la que acudieron gentes de todos los alrededores de la ciudad. Como diera la casualidad de que por aquellas fechas Cervantes le había dedicado la primera parte de su Don Quijote de la Mancha, quiso agradecerle la deferencia, invitándole a la inauguración y a que escribiera la crónica de la corrida inaugural. Cervantes aceptó la invitación siempre y cuando el traslado hasta Béjar fuera en el carruaje del Duque: ya que no se encontraba con las fuerzas necesarias para hacer las cuarentas leguas a caballo desde la Corte de Valladolid. Como era costumbre en la época, ésta fue guardada y enterrada en los entresijos de la plaza.

Después de algún tiempo trabajando en el original, el experto consiguió descifrar lo siguiente: En el día de hoy, a la taurina hora de las cinco de la tarde, cuando más calentaba el sol y las moscas más afrontonas se encontraban, se lidiaron seis toros seis de la ganadería del Calvatruenos de Sierra Negra, que llevaban los siguientes nombres: Mondongo, Paniaguado, Caprichoso, Burlador, Cachidiablo y Tiquitoc. Todos de buena presencia, nobles y de excepcional bravura: tanta que fueron indultados para que su simiente produjera buenos vástagos en las ganaderías del campo charro. Además de otras consideraciones, consiguió determinar que los espadas participantes en la tarde inaugural habían sido D Quijote, que realizo una gran faena, destacando unas verónicas en el centro del albero, hundido el mentón, que puso la plaza boca abajo. La terna la completaban Sancho Panza y Dulcinea del Toboso que no desmerecieron del primer espada.

Los originales en este momento están expuestos en una vitrina del Convento de San Francisco, tal y como fueron hallados por los aprendices de albañil en el interior de la caja de plomo. Una transcripción completa del texto acompaña al hallazgo.






12 comentarios:

Manolo dijo...

Qué sorpresa. Don Quijote lidiando toros.
Muy bueno el relato.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

¡Qué regalo para terminar la Primera parte!
Esta plaza es un lujo.

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

Que bueno....interesantísimo. Digno como dice Pedro de un final.Gracias maigo...

pancho dijo...

Manolo: Influencia de la feria de las ferias: la de Madrid.

Pedro: España está llena de sorpresas en muchos de sus rincones. Sólo hay que saber perderse Fuente del Lobo arriba.

Tucci: Producto de esta lectura que nos hace pensar cosas extrañas.

Un abrazo a los tres. Honrado de que tres grandes de la blogosfera visiten este chiringuito chico.

Abejita de la Vega dijo...

Me quedé con la boca abierta a leer tu entrada.¡Don Quijote torero! ¡Genial la faena!¡Bien por Pancho capaz de dar un imaginativo vuelco al texto cervantino!
Mi enhorabuena.

FERNANDO SANCHEZ POSTIGO dijo...

Un Quijote torero y oleeeeeeeeeeeee!!! Magnífico post. SE nota gran nivel en este blog. Un abrazo.

Antonio Aguilera dijo...

Nunca he asistido a una corrida de toros............PERO A ÈSTA ME APUNTO CON LOS OJOS CERRADOS.

Genial, Pancho, genial.

pancho dijo...

Abejita, Fernando y Aguilera: el asunto es que leía y releía los poemas finales y no era capaz de sacar comentario. Enseguida me parecieron que los seis nombres bien podían ser los seis toros seis de la corrida inaugural de la plaza del Castañar. Lo demás salió sobre la marcha. Tampoco soy muy aficionado a los toros, pero suelo leer las crónicas de las ferias grandes. Sin embargo, por aquí no se concibe una fiesta sin encierros y corrida por la tarde. Si os dais cuenta indulté a los seis, para que los antitaurinos no se ofendan. Vaya vida regalada que vivieron después de sementales.
Otra cosa que me atrae de este mundillo es el tipo de vocabulario que emplea. Muchas veces se ha trasladado a otros aspectos de la vida cotidiana.
Muchas gracias por los elogios que no me los esperaba. Lo malo de esto es que uno después se lo cree...
Un abrazo a todos y gracias por vuestos comentarios y visitas.

Merche Pallarés dijo...

Como dicen todos, ¡genial esta corrida quijotesca! Me ha encantado tu texto. Un digno final a la primera parte. Congratulations dear Pancho!! Besotes, M.

pancho dijo...

Merche: has vuelto a dar en el clavo, desde ahora en vez de goyescas serán del Quijote.

PENELOPE-GELU dijo...

Buenos días, pancho:

La verdad es que sonaban a nombres de toros.
Y me encantó que en tu comentario los indultaras. ¡Qué curioso!. Mi Jean Paul también lo hubiera hecho.

Saludos. Gelu

P.D.: Intenta incluir la opción "Anónimo". No quiero eternizarme en mi papel de Penélope, a lo que me obliga Blogger, para aceptarme y poder entrar.

pancho dijo...

Gelu: Ya estuve hablando con mi mecánico de blogs, Manolo, sobre este tema y parece que tenías razón. No estaba habilitada esa opción. Creo que ya hizo algo para que funcione. Vamos a tener que aprender de todo para poder funcionar en este mundillo virtual.
Gracias por tu visita y comentario.